Un operativo liderado por la Alcaldía de la localidad de Los Mártires en Bogotá permitió identificar que en pleno centro de la capital se encuentra ubicada una casa que se había convertido en escenario de frecuentes secuestros, torturas, tráfico de drogas y prostitución, a pesar de que las autoridades tenían conocimiento de los hechos que se cometían en el lugar.
Uno de los testimonios es el de una mujer que llegó al sitio motivada por la promesa de que conseguiría empleo, aunque lo que encontró fueron momentos aterradores en los que sufrió golpes, abusos y malos tratos, junto a otras mujeres.
Según la denuncia, la joven estuvo retenida en ese lugar durante varios días en los que fue golpeada, amenazada y despojada de sus pertenencias personales. Le apuntaron con un arma, la obligaron a desnudarse y a masturbarse mientras los secuestradores la grababan con un celular, amenazándola con divulgar las imágenes si denunciaba lo sucedido.